Se trata de Cerveza Euthopia, un proyecto que combina la tradición cervecera con un enfoque innovador y sostenible que ha conquistado paladares dentro y fuera de su región. La historia detrás de este emprendimiento ganador del Concurso Experiencias del Sabor.

La cebada es el cuarto cereal más importante del mundo en caudal de producción y un pilar clave en la producción cervecera. Argentina, con sus cinco millones de toneladas anuales, concentra la mayor parte del cultivo en la provincia de Buenos Aires, exportando principalmente a Brasil. Para ponerlo en perspectiva: se necesitan 17 kilos de cebada para producir 100 litros de cerveza, lo que hace evidente la relevancia de este cultivo en la industria cervecera.

En este contexto, Cerveza Euthopia se destaca como un proyecto único que, desde Trevelin, Chubut, apuesta por la calidad artesanal, los ingredientes locales y la sustentabilidad. Fundada en 2017, esta cervecería combina la tradición cervecera con un enfoque innovador y sostenible que ha conquistado paladares dentro y fuera de su región.

En julio de 2024, Euthopia fue premiada por segundo año consecutivo como la Mejor Cerveza en el concurso Experiencias del Sabor de la feria Caminos y Sabores, reafirmando su lugar entre las mejores propuestas cerveceras del país. Al respecto, Tomás Bajar, director de Cerveza Euthopia, contó cómo esta marca construyó un modelo único basado en la economía circular, el uso de ingredientes locales y un profundo respeto por el entorno.

 

Un «buen lugar» para vivir y crear

El nombre Euthopia hace referencia a un buen lugar, difícil de encontrar pero posible. Así es como vivimos y trabajamos”, explica Tomás. Este proyecto nació en 2017 con una clara convicción: producir cerveza artesanal con ingredientes locales y cuidado extremo en cada etapa del proceso. “Llegamos a Trevelin buscando ese ‘lugar ideal’ para vivir. Trevelin es, sin dudas, uno de ellos”.

El uso de productos orgánicos y locales no es solo una elección, sino el pilar fundamental de la calidad en Euthopia. “La frescura y la trazabilidad del producto son clave. Esto impacta directamente en la calidad de nuestras cervezas”, detalla. Su enfoque “desde la chacra hasta la copa” no solo refuerza la calidad, sino que promueve una economía circular en la que los vecinos trabajan juntos, fortaleciendo la comunidad local.

Hitos y reconocimiento

Un momento clave en la historia de Euthopia ocurrió en 2018, cuando presentaron sus cervezas en Buenos Aires, en Bodega de Cervezas. “Tuvo un éxito rotundo. Nos dimos cuenta de que lo que estábamos haciendo era único y muy valorado. Recibimos excelentes críticas que nos impulsaron a seguir creciendo”, recuerda Tomás.

Hoy, Euthopia se distingue por tres líneas principales:

  1. Cervezas barricadas: de fermentación mixta, reposan un año en barricas con frutas locales como frambuesas, desarrollando sabores únicos.
    2. Cervezas KM 0:elaboradas casi en su totalidad con insumos locales, destacando ingredientes como zanahorias o pepinos.
    3. Cervezas frescas tradicionales: como la IPA Argenta o la galardonada Patagonian Pale Ale Antigua, ganadora del concurso por segundo año consecutivo.

Entre estas, las cervezas barricadas ocupan un lugar especial. “Estas cervezas descansan en barricas, donde refermentan y luego son blendeadas para destacar aromas y lograr una gran tomabilidad. Son únicas y representan nuestra esencia”, asegura.

Mirando al futuro

Cerveza Euthopia está en plena etapa de expansión. “Queremos llevar nuestra idea a más lugares y contagiar la pasión por lo local. Creemos que nuestra propuesta no solo es posible, sino necesaria”, concluye Tomás.

Con su filosofía de economía circular, compromiso con la comunidad y un enfoque en la calidad extrema, Euthopia sigue marcando el camino. Este 2024, su premio en Caminos y Sabores no solo ratifica su lugar en la élite cervecera, sino que también refuerza su misión de conectar a las personas con lo mejor de la Patagonia en cada copa. “En los últimos 10 años hemos trabajado en mejorar la calidad y educar el paladar de los consumidores. Ahora, el desafío es mantenerse y seguir creciendo”, afirma Tomás.